Todos tenemos una mejor amiga, una canción favorita, incluso unos vaqueros favoritos, y los usamos a veces hasta los 3 a la vez, cuando queremos comernos el mundo, pues bien, si estás pensando en divorciarte a esa triada tienes que añadirle tu abogado o abogada favorita. Elegir abogado es como elegir nombre o carrito para tu bebé. Tiene que ser conocido, que te enamore cada vez que lo oigas o veas, pero también que sea práctico (Felipe Juan Frolian, aunque suene bien no es nada práctico), que te facilite la vida y que además lo luzcas con orgullo. Tu abogado te sacará muchas castañas del fuego, te liberará de pensamientos y acciones que creías correctos y si lo hace bien, gritarás a los 4 vientos su nombre, y gastarás mas tarjetas de visita que él mismo. Y al igual que los carritos de bebé, no hay un solo modelo, incluso una misma marca tiene varios donde elegir, para adaptarse a las necesidades personales, y créeme que estar por primera vez delante de un abogado de...
Divorciarse no es un drama y yo te lo voy a demostrar.